Vés al contingut
29/10/2012 / pergoblog

Dario Ortiz

“Y cuánto había amado, había vivido, / Había pintado cuando pintó ese cuerpo: / Cerca de los cien años prodigiosos; / Mas su fervor humano, agradecido al mundo, / Inocente aún era en él, como en el mozo / Destinado a ser hombre sólo y para siempre.” (Luis Cernuda) DO